Consejeros electorales del Instituto Nacional Electoral (INE) de Puebla advirtieron que no pasarán por alto la violencia del 1 julio en el estado de Puebla, debido a que esto significaría “avalar una elección manchada de sangre”, que ya dejó cuatro heridos de bala y mantienen en zozobra a los funcionarios a cargo de concluir los comicios.
En la sesión del Consejo Local, el consejero Jordan Miranda Trejo informó que hasta este momento se han presentado siete denuncias penales ante la Fepade, Fepadep y el Ministerio Público de Izúcar de Matamoros por las agresiones que tanto capacitadores y supervisores del INE, como ciudadanos sufrieron a causa de las balaceras registradas durante las votaciones en las casillas de los 15 distritos federales.
A la postura de Miranda se sumó el consejero Alfredo Domínguez Buenfil, quien recriminó que las agresiones contra las personas que participaron en el proceso electoral continúen y les hayan generado hasta “crisis de ansiedad” por el temor ante posibles nuevos incidentes.
El representante del INE sostuvo que hay omisión de las corporaciones de seguridad del estado y que los elementos del Ejército fueron los que acudieron al llamado de las juntas distritales para mantener el orden y salvaguardar la integridad de los funcionarios de casilla.
