Los celos extremos, conocidos también como el Síndrome de Otelo, pueden tratarse de un indicador de esquizofrenia, pues aunque sentir celos es una emoción natural e incluso se puede presentar en la infancia, quienes los sufren de forma patológica se caracterizan por tener actitudes irracionales, violentas y obsesivas, siempre relacionadas a supuestas infidelidades de parte de su pareja o allegados, informó el Instituto Mexicano del Seguro Social.

La celopatía o el delirio celotípico se conoce como Síndrome de Otelo, en alusión al personaje de la novela trágica de Shakespeare, “Otelo”, de quien recibe su nombre, caracterizado por una preocupación excesiva e irracional sobre la infidelidad de la pareja, donde el paciente está absolutamente convencido de que su pareja le es infiel sin motivo que lo justifique.

El psicólogo del Centro de Capacitación y Calidad del IMSS, Héctor Joel Rojas Ciprés manifestó que los celos son una respuesta común cuando se presenta una amenaza que podría alejarnos de un ser querido, un objeto o una función.

Sin embargo, la persona que padece del Síndrome de Otelo normalmente no lo sabe, y se encuentra  en constante vigilancia de su pareja, busca causas o justificación de un engaño y es incapaz de controlar sus impulsos o pensamientos, lo que afecta su percepción de la realidad.

Rojas Ciprés comentó que el Síndrome de Otelo está relacionado con la esquizofrenia, además se deriva también en diversos tipos de delirios, como el delirio de persecución, o la hipocondría, que es el temor constante de contraer o desarrollar una enfermedad, entre otros.

La manifestación de los síntomas del Síndrome de Otelo puede desencadenarse ante pequeñas variaciones en la vida cotidiana de la pareja, como cambiar la ropa de un cajón a otro, comprar una marca distinta de comida o retrasarse unos minutos en la hora habitual de llegada, es decir, cualquier actitud que la persona con este síndrome puede considerar sospechosa, entre otras.

“Los celos patológicos, no solo afectan a un nivel psicológico y físico al individuo, sino que también afectan su ámbito social y laboral, ya que puede incurrir en violencia doméstica, despido laboral o problemas legales, en casos graves pueden concluir en homicidio”.

Rojas Ciprés puntualizó la importancia de tratar este síndrome con profesionales, pues se trata de un desorden o trastorno del cerebro que altera la manera de pensar, de sentir y puede afectar el estado de ánimo así como la habilidad para relacionarse con otras personas.

El especialista señaló que en caso de padecer estos celos extremos, es importante que el paciente acuda a su Unidad de Medicina Familiar u Hospital del IMSS, para que solicite una consulta en el área de Psicología, donde un profesional podrá orientarlo, o bien adquirir más información con respecto a esta enfermedad.