El Instituto Hidalguense de las Mujeres firmó un convenio de colaboración con la Asociación de Mujeres Indígenas “Yankuik Sitlali” que administra la Casa de la Mujer Indígena de Huejutla, con el fin de conjuntar esfuerzos en favor de mujeres de la región Huasteca, que viven en situación de violencia.
La directora del IHM, María Concepción Hernández Aragón, suscribió el acuerdo con la presidenta de la Casa de la Mujer Indígena, Elvia Hernández Domínguez, e informó que ambas instituciones se comprometen con este convenio a generar todo tipo de acciones que permitan el fortalecimiento mutuo, desde sus respectivas atribuciones.
Indicó que de manera específica, el Instituto Hidalguense de las Mujeres se compromete a impartir conferencias, pláticas, talleres, así como brindar orientación, asesoría jurídica y terapia psicológica a las mujeres canalizadas por la Casa de la Mujer Indígena, hacia los Módulos de Atención Especializada y los Centros de Desarrollo para las Mujeres con que cuenta en Instituto en esa zona.
Hernández Aragón reconoció que el sector indígena tiene mayores desventajas, por ello es compromiso de la Secretaría de Gobierno, ponderar acciones para acelerar la igualdad y contrarrestar la discriminación que viven las niñas, adolescentes, mujeres adultas y de la tercera edad, especialmente en el acceso a la justicia, para lo cual trabajarán también con otras instituciones como el DIF y el Centro de Atención a Víctimas.
La Casa de la Mujer Indígena de Huejutla tiene una larga trayectoria en trabajo de asesoría y acompañamiento a mujeres en situación de violencia y seguimiento de sus casos en la Huasteca hidalguense, con estrecha colaboración con las Instancias Municipales para el Desarrollo de las Mujeres de los municipios de Yahualica, Xochiatipan, Jaltocán, Huejutla, San Felipe, Atlapexco y Huautla, trabajo que se intensificará con este convenio.
Precisamente Elvia Hernández, presidenta de la casa, mencionó que junto con Ana María Romero y un grupo de colaboradoras, proporcionan un servicio con calidad y calidez, tanto en procesos de denuncia y seguimiento, como en las diversas capacitaciones en materia de salud sexual y reproductiva que se imparten en lengua materna, el náhuatl, lo que fortalece la confianza de las mujeres indígenas, quienes se sienten comprendidas y apoyadas, al no tener la barrera del idioma.
De esta manera, coadyuvan con facilitar su acceso a la justicia y también les brindan herramientas para que se empoderen y puedan salir del círculo de la violencia.
Hernández Aragón adelantó que este acuerdo será la puerta para otras actividades conjuntas en favor de los derechos humanos de las mujeres, en atención a una estrategia nacional que involucra a los estados, municipios y organizaciones de la sociedad civil.
