Cientos de personas se dieron cita en las calles del centro de Pachuca para observar el recorrido que realizaron las diferentes comparsas con motivo de la Magia de los Carnavales, que llevaron el colorido de 50 municipios que realizan sus carnavales en Hidalgo, para mostrarlo a los habitantes de la capital hidalguense que lo recibieron con enorme entusiasmo.

Más de 3 mil personas representando a los 50 municipios que cuentan con carnaval en la entidad participaron de este colorido desfile de inicio de carnaval, que atestiguaron miles de pachuqueños que se concentraron al paso de este pasacalles, que salió del estadio Revolución Mexicana, para enfilar por Revolución al centro, pasando por Plaza Independencia, la calle de Guerrero y culminar en Plaza Juárez.

En carros descubiertos de Turismo, las reinas de feria de los municipios de Pachuca, Real del Monte, la Señorita Miss Hidalgo, e incluso el Pachus y la mascota de las Tuzas femenil se paseaban en un carro descubierto que abría el desfile, mientras lanzaban dulces a su paso por las calles del centro de Pachuca.

En las comparsas, cientos de enmascarados secundaban a las reinas de este carnaval, muchos de ellos estudiantes de universidades tecnológicas o politécnicas, llegando en primer lugar una comparsa de Chapulhuacán, con disfraces de futbol y de viejitos, así como la agrupación de Acaxochitlán.

Bandas de viento alegraban las comparsas, siguiendo una comparsa de Huauchinango, estado de Puebla, también una comparsa de San Luis Potosí, y de Mineral del Chico con música de viento y personajes vestidos con mascarones de rostro español y diablitos, encabezados por Judas Iscariote.

De Calnali llegó la comparsa del inicio del ciclo agrícola, quienes llegaron escoltando a una bella mujer, que encabezaba a los cuernudos, vestidos con estilo vaquero, con un sombrero, collar de cuentas, chaleco y chaparreras de color café, camisa blanca y máscaras rojas representando el demonio.

A ellos siguió la comparsa de jóvenes del carnaval de Huejutla de Reyes, que llegó bailando con indumentaria de tipo indígena, agitándose para sacarse el frío helado que hizo durante la tarde pachuqueña.

San Salvador llegó con un ballet de jovencitas vestidas llamativamente, como si fuesen arlequines, daban piruetas y otras más flanqueaban a otra muchacha de cuya cintura salían coloridas telas cual si fueran gruesos listones.

La comparsa del Pueblo Mágico de Zimapán llegó bailando con chicas vestidas con vestidos blancos bordados, acompañadas de muchachos ataviados a la usanza minera, seguidos del grupo del municipio de San Agustín Mezquititlán, que venía con máscaras de madera, de color blanco con rasgos demoniaco, con cabelleras blancas, con su carnaval dedicado al Señor de la Maravillas.

Los jóvenes de Xochiatipán venía saltando con vistosas indumentarias, uno muy particular de un búho, con trajes típicos como gabanes, además de los mecos, quienes llegaron junto con las comparsas de Huautla, con jóvenes vestidos de pantalón blanco y pintado el torso de blanco y negro, con la danza de los conegros, mientras Tenango de Doria también llevaban su caravana de mecos.

Zacualtipán traía mucho colorido, con jóvenes de pelucas de colores y otros vestidos de comanche, de amarillo y rojo, que bailaban muy animados

Yahualica traía sus pintos, con decenas de jóvenes con una caña en la mano y el torso pintado de blanco salpicado de motas negras, con shorts de color negro y sombrero.

Con tela de manta, sombrero, paliacates y máscaras de españoles llegaron saltando y azotando algunos objetos, arribó la comparsa de Eloxochitlán, que traía detrás a los de Alfajayucan, con una bandera grande y la Virgen de Guadalupe enarbolada, quienes vestidos de un traje azul brillante con bordados dorados, desataron una guerra de naranjazos en la Plaza Juárez de Pachuca.

Metztitlán hizo su arribo con la comparsa metzca, con charros que portaban mascaras de españoles barbones que se daban de chicotazos mientras hacían la viborita chirrionera, acompañados igual de los diablos de la comunidad de San Cristobal, que traían saco negro y corbata verde.

Pisaflores arribó con sus viejos mascarudos, acompañados de Tecozautla, que tenían unos muy coloridos trajes con colores fosforescentes, diseños muy llamativos en traje de charro, mientras que unos jóvenes veneraban con unas banderolas a Santiago Apostol.

Atlapexco también traía a sus chicos con varas de color rojo y pintados del torso, con calzón blanco, seguidos de diablos cornudos de Molango, con trajes negros y máscaras rojas demoniacas, lo mismo que la comparsa de jóvenes de Huichapan.

La Misión no se quedó atrás con sus mascarudos, que arrojaban spray de espuma a su paso, llegando detrás de ellos Nopala, con charros floreando la cuerda y jóvenes con mojiganga y otros ataviados de transformers, con luces led de colores.

Con hermosos trajes indígenas llegaron los jóvenes de Chilcuautla, portando mascaras de madera y enarbolando un estandarte del Sagrado Corazón de Jesús.

Mineral de la Reforma estuvo representado por jóvenes vestidos de negro y máscaras de conejo, una comparsa completamente citadina, escoltados por Jaltocán, que traía sus banderines de color, único municipio que celebra dos carnavales en Hidalgo.

Tepejí llegó con jóvenes de camisas negro y blanco, de camisas rojas y con chicas tipo bastoneras, con una nutrida banda musical, seguida de Tlanchinol, con hombres y mujeres de sombrero huasteco, mientras un joven blandía un torito multicolor al compás de la música de viento.

Mixquiahuala, mostraba el pone y quita bandera, con jóvenes que iban vestidos de mayordomo que tenían muñecos consigo con un lazo, además de una gran banda, a la que siguió la comparsa de Atotonilco El Grande, el carnaval de Tlaxcoapan, cuyos integrantes hacían una ronda, seguidos de Atotonilco de Tula, Tepeapulco, Tolcayuca con matraqueros, Apan, Tulancingo con la comparsa de la comunidad de Santa Ana Hueytlalpan, Metepec, Tizayuca, Zempoala, San Bartolo Tutotepec, El Arenal, Pacula con sus viejos de la Semana Santa, Tianguistengo con su comparsa de panaderos, que hacían muy originales evoluciones con palas de pan de leña.

La localidad de Camelia, de Pachuca, hizo su aparición representando a Pachuca, al igual que el muy animado y saltarín carnaval de la colonia La Raza, en lo alto del cerro de Cubitos, a quienes siguió Actopan con sus catrinas y mujeres de lienzos y vestidos blancos.

Huehuetla presentó su danza de fuego, con sus huehues, que portaban vistosos penachos, arribando detrás de ellos la comparsa de Zacualtipán, que cerró el vistoso desfile de la Magia de los Carnavales.