Por Claudia Aguilar/Síntesis
Cerca de 10% de la población tiene problemas renales y la obesidad se ha convertido en la causa principal para la aparición de males del riñón, informó Rocío Techalotzi Cano, coordinadora del programa de donación del Hospital San Alejandro del IMSS Puebla.
Señaló que cuando un paciente enferma al grado de perder la función de sus órganos, tiene que esperar entre 6 y 10 años para conseguir que alguien le done un riñón, ya sea por la vía cadavérica o de un paciente vivo.
En este sentido, la especialista refirió que el Instituto Mexicano del Seguro Social cuenta con el programa de trasplante renal pediátrico, a través de cual se han salvado vidas, aunque actualmente existe en lista de espera de más de mil 100 personas.
Algunos de estos enfermos están en el Hospital San Alejandro, 25, y el resto de los pacientes permanecen en el Hospital de San José, en espera de un riñón.
Tan sólo en el año 2015 el IMSS Puebla realizó 7 trasplantes pediátricos de origen cadavérico, cantidad similar a la que se efectúo en 2016.
Mientras que en el primer trimestre de este año se realizó la primera donación de trasplante renal cadavérico para una menor de edad; en la lista de espera el paciente más pequeño tiene 4 años y el más grande 24.
De acuerdo con datos de la paraestatal en la última década en el estado de Puebla se han llevado a cabo 122 trasplantes de riñón a niños, disminuyendo la cifra de pacientes con relación a otras entidades.
